El central Federico Matías León, último capitán de Almirante Brown, junto a Sebastian Ereros (ex Chacarita) ya se pusieron la celeste de Club Deportes Iquique, la que defenderán en la Copa Chile, Torneo de Clausura y la Copa Bridgestone Sudamericana.
Federico León usará la 22 celeste.
Figura Mirasol
Federico León tiene 27 años, y todo lo que sabía de Iquique, es justamente todo lo que le pudo transmitir Rodrigo Rengo Díaz, a quien tuvo de compañero en Almirante Brown. Su último equipo en cinco años.
“El Rengo me habló del trato de la gente y de los esfuerzos del club, así que no dudé en venir, pues se trata de un paso futbolístico y un crecimiento muy importante, ya que si bien siempre estuvimos a una o dos posiciones de poder disputar una liguilla de ascenso a la primera argentina, jugar en la primera de Chile y tener la opción de luchar por una copa internacional es un desafío enorme”, sostuvo el último capitán del equipo Mirasol, quien si bien tiene la estampa de un tipo sereno, dentro de la cancha suele recibir la mayoría de los epítetos que rimen con enajenado.
“En la cancha soy otra persona, pues no sé, afuera soy un tipo feliz tal como me crió mi familia, pero adentro doy todo, tengo un amor inmenso por ganar, por progresar y ayudar al del lado para que las cosas resulten, aunque todo bajo control, pues me han expulsado sólo dos veces en 150 partidos”.
Con relación a su posición ideal, el nuevo número 22 de los Dragones indicó que lo suyo es defender el arco. “Puedo jugar de central y de líbero por el sector que sea necesario, pues si bien soy derecho, no tengo inconvenientes para adaptarme al esquema. También iría de marcador central o por las bandas para situaciones puntuales”.
Fuente : Club Deportes Iquique.
Federico León tiene 27 años, y todo lo que sabía de Iquique, es justamente todo lo que le pudo transmitir Rodrigo Rengo Díaz, a quien tuvo de compañero en Almirante Brown. Su último equipo en cinco años.
“El Rengo me habló del trato de la gente y de los esfuerzos del club, así que no dudé en venir, pues se trata de un paso futbolístico y un crecimiento muy importante, ya que si bien siempre estuvimos a una o dos posiciones de poder disputar una liguilla de ascenso a la primera argentina, jugar en la primera de Chile y tener la opción de luchar por una copa internacional es un desafío enorme”, sostuvo el último capitán del equipo Mirasol, quien si bien tiene la estampa de un tipo sereno, dentro de la cancha suele recibir la mayoría de los epítetos que rimen con enajenado.
“En la cancha soy otra persona, pues no sé, afuera soy un tipo feliz tal como me crió mi familia, pero adentro doy todo, tengo un amor inmenso por ganar, por progresar y ayudar al del lado para que las cosas resulten, aunque todo bajo control, pues me han expulsado sólo dos veces en 150 partidos”.
Con relación a su posición ideal, el nuevo número 22 de los Dragones indicó que lo suyo es defender el arco. “Puedo jugar de central y de líbero por el sector que sea necesario, pues si bien soy derecho, no tengo inconvenientes para adaptarme al esquema. También iría de marcador central o por las bandas para situaciones puntuales”.
-¿Y su relación con el
gol?
Me gusta subir e
intentar ganar en el área rival, pero más que goles de cabeza me tengo fe en la
disputa de los balones divididos, que es como he marcado últimamente.
Fuente : Club Deportes Iquique.
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